Tal día como hoy, el Rey de España inauguraba la Expo 92. A falta de actos oficiales, el asunto se ha despachado institucionalmente con la presentación de un cartel conmemorativo. Espontáneamente (o no tanto), la población se ha volcado con sus recuerdos en Twitter y el resto de redes sociales. Una conmemoración íntima, para el sevillano, no para el turista.
Los medios de comunicación se han volcado con el archivo, y quien quiera leer hasta cansarse puede hacerlo aquí: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10. Nosotros preferimos resumir con dos vídeos. Uno es sobre un escalofriante cementerio de mobiliario y atrezo de la Expo 92. Materiales ajados por el abandono en un almacén al aire libre, piezas repetidas una y otra vez como un estribillo pop pasado de moda, con una sensación de obsolescencia que contradice aquello de que 20 años no es nada.
El otro vídeo sintetiza el sentir de buena parte de la población. Queremos curro, pero tenemos que conformanos con Curro:
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